Se aprecian algunas diferencias entre los negros de la
sierra y de la costa, pero les unen unas raíces, un país y una historia
comunes.
La historia del pueblo negro en Ecuador y en toda América
Latina está marcada por el sufrimiento y la resistencia, pero los hombres y las
mujeres negras no han perdido la alegría de vivir que les caracteriza, una
alegría y un optimismo vital que se manifiestan incluso en momentos de gran
sufrimiento
La historia de África -en muchos textos- comienza desde la
época de la esclavitud. La vida y culturas antiguas son contadas en libros
escritos por blancos. Incluso en la mayoría de países de África en la
actualidad son pocos los negros que reconocen su cultura, con una carencia por
el estudio de lo ancestral. Según el historiador africano Runoko Rashidi “Lo
que uno es depende de lo que uno hace por uno mismo, y lo que uno hace por uno
mismo depende de lo que se sabe de uno mismo” . El aporte de la cultura
africana para la humanidad es de gran magnitud y relevancia. Varias investigaciones
realizadas con ayuda de la tecnología han determinado que los primeros
habitantes del mundo poblaron y salieron de África, precisamente en los
alrededores del Lago Victoria y desde este continente empezaron a regarse por
todo el mundo
Nacimiento
El nacimiento de
un niño, por lo general acompañado y ayudado por una comadrona (la madre y/o
amigas) es netamente cosa de mujeres. Mientras la mujer esta dando a luz, el
marido esperando o caminando con los amigos, teniendo listo el aguardiente para
festejar el evento. Una vez nacido el niño suele dar tres disparos si es varón
y uno si es mujer. Las mujeres suelen simplemente visitar a la madre, ver al
bebe y comentar el nacimiento o darle algunos consejos.
Bautizo
La fiesta se hace
en la casa del padrino o la madrina, que a través de este rito se hacen
‘compadres’ de los padres del niño, una relación, que tiene un fondo religioso
y es muy respetada por la población de Esmeraldas. El rito del bautizo mismo es
sencillo: se rezan tres Credos echando el agua del socorro en la cabeza del
niño después de cada Credo y diciendo: “N.N., Dios te bautiza en el nombre del
Padre, del hijo y del Espíritu Santo”. El niño tiene que estar vestido de
blanco de manera que estén tapados los pies, se dice que con este vestido le va
a hacer la mortaja a la madrina cuando se muera.
Después de que los
padres sirvieron una comida a los padrinos e invitados, por la noche -según los
medios económicos de los padres y padrinos- se hace un baile en la casa.
Luego, según los
reglamentos de los sacerdotes de la zona, se lo “olea”. Actualmente se vuelve a
dar nuevamente el bautizo por el sacerdote, evento que ya no tiene la misma
repercusión social, ya que por el agua bendita echada en el primer acto el
niñota se hizo cristiano, siendo de esa manera más protegido contra los
peligros del monte, a donde la mamá muchas veces tiene que llevarlo, y los
peligros por parte de brujas y ánimas.
Chigualo
En caso de que se
muera un niño, más o menos hasta los 9-10 años, se acostumbra hacerle el
‘chigualo’, siendo responsabilidad económica de los padrinos. A los niños
difuntos se los suele llamar angelitos. Como documento se transcribe uno de los
tantos versos que en esta ocasión se cantan:
“Tu padrino te ha de dar
Canalete para bogar,
Tu madrina te ha de dar
Rosario para rezar”,
Ya que el angelito
también tiene que ayudar a sus padrinos para alcanzar la gloria, una vez que se
mueran ellos.
‘Al Angelito’ se
viste de blanco dándole una corona y una palma de papel blanco, como símbolo
del inmediato acceso a la gloria y se lo acomoda en la sala en un altarcito
como se acostumbra para los Santos en los días de sus fiestas. Velándolo, de
noche se le canta arrullos y chigualos acompañados por marimba, bombos,
cununos, guazás y maracas. Son en parte los mismos arrullos que también se
cantan para hacer dormir a los bebes vivos y en los velorios alegres que se
sueles hacer a los Santos. Pero la música es alegre ya que se considera causa
de alegría que un angelito haya alcanzado la gloria. Los ritmos llevan a las
mujeres cantoras a bailar, a veces la madrina baila con el angelito en brazo.
Después de la
media noche se acostumbra hacer juegos que por un lado reflejan la situación de
pérdida de un hijo, como dice el verso:
“Se fue la luluta- se me fue
Se fue la luluta-se me fue”.
Pasando la bolita
de mano en mano; por el otro lado presentan un elemento mas de alegría, ya que
a los niños siempre les gusta jugar.
Al vestir al
angelito y en la iglesia, antes de enterrarlo, siempre se procura darle agua
bendita ya que se cree que los niños enterrados sin bautizo suelen llorar de
noche, hasta que alguien les eche el agua bendita, allá donde se oye el llanto
y recién con eso el angelito alcanza la gloria.
El día siguiente
pero siempre guardando las 24 horas, se realiza el entierro, llevando el
angelito en una caja blanca a la iglesia. Se los entierra en posición con la
cara hacia donde se levanta el sol o hacia el pueblo. A diferencia de los
adultos que se los entierra con la cara mirando hacia donde se opone el sol.
En los días
siguientes algunas mujeres tratan de quedarse acompañando a la familia del
difunto ‘angelito’. En muestra de solidaridad acompañan sobre todo a la madre,
para ayudarla a olvidar, acompañando día y noche.
Matrimonio
Los afro
esmeraldeños, por una serie de razones históricas, poco suelen casarse por lo
civil o eclesiástico, ni consideran el estado de pareja como definitivo o
único.
Cuando dos jóvenes
se enamoran, cosa que a nivel rural a veces sucede sin que la comunidad se de
cuenta ya que no se conocen las manifestaciones de afecto en público, el joven
se pone de acuerdo con los padres de la chica, los cuales generalmente no ponen
ningún obstáculo. “Son cosas de la vida”. Se fija el día en el cual uno de los
dos- generalmente la mujer- se cambia a la casa del otro. Ahí es que la
comunidad se da cuenta y viene a visitar a la nueva pareja que tiene que brindar
algo a los visitantes. A veces -dependiendo de la mujeres- se realiza la
‘parranda’, acto comunitario que muchas veces se acostumbra en las fiestas de
Santos.
Al ritmo de
melódicas bombas la nueva pareja es visitada primero por los abuelos y padrinos
y luego es presentada en cada casa, en esta pequeña fiesta brindan con licor
sobre todo las abuelas y madrinas de la chica se dedican a dar consejos con
respecto al nuevo comportamiento que debe adquirir la chica como “esposa”.
Según el animo de los asistentes esta parranda se puede seguir festejando todo
el día sin que la pareja tenga que realizar gastos para ella, se toma como
resolución luego de años de vida de pareja y familia cuando se ha visto que hay
“comprensión”, talvez sea posible que esta pareja decida casarse, pero rara vez
lo realizan por lo eclesiástico. Como en toda sociedad existen parejas que
nunca se casaron, como otras que se separan volviéndose a juntar, cada uno por
su cuenta.
Velorio de un muerto
Un evento de suma
importancia es la muerte de un mayor, no solo por el vacio que causa social y
económicamente sino porque del cumplimiento, con el ritmo funerario “depende
del viaje del alma a su lugar”.
Se suele velar un
noche en la casa, se viste al finado de blanco y con una faja con cinco nudos
que le sirve para defenderse en “su viaje”, mientras los hombre en una casa
vecina están fabricando el ataúd con tablas de madera, forrada de tela blanca
por dentro, las mujeres acompañan cantando alabados toda la noche
ininterrumpidas tres veces por la oración o por el rosario, en lugares con
mayor tradición religiosa se ora dos veces, interrumpen estas oraciones para
servir una comida o café según las posibilidades económicas. Estas oraciones o
alabados tienen una melodía triste se los cantan sin instrumentos y suelen
tener contenido con respecto a la pasión de Cristo, la muerte, y de algunos
Santos.
El dia siguiente
luego de 24 horas cumplidas, ya que siempre se cuenta de que unos muertos antes
de cumplirse las 24 horas volvieron a vivir, se los lleva a la iglesia en el
ataúd cargado en los hombros de los conocidos, allí se despiden los familiares,
se dirigen al cementerio acompañados por la mayoría de la comunidad.
Las nueve noches
que siguen al entierro se acostumbra a reunirse en la casa del finado para
rezar el rosario. En la última noche se realiza la novena que es la despedida
definitiva del alma del finado, “hasta ese momento se supone que el alma del
finado se había quedado alrededor de la casa”. Para esta ultima novena se
construye un altar con una pequeña escalera al pie de esta se realiza con una
apariencia de ataúd, se empieza cantando como en el velorio y se reza tres
veces antes de las doce o dos de la madrugada, se desbarata el altar formando
un callejón desde donde estaba el altar hasta la puerta para que pueda salir el
alma a su viaje definitivo que tiene que terminar antes que el gallo cante.
Este momento es de suma tensión y atención, lleno de gritos, llantos, dando
origen a una serie de creencias. Aunque a nivel urbano ya no se cantan alabados
y se ha perdido una serie de elementos de estos ritos.
Al año se realiza
una misa y se pone la cruz en la tumba.
Las Fiestas
Están
principalmente las fiestas religiosas como; Navidad, Semana Santa, Fieles
Difuntos, Los Días de algunos Santos Populares “San Antonio”, La Virgen del
Carmen, La Virgen de la Merced, La Virgen de las Lajas, y demás Santos Patrones
de las respectivas capillas.
Estas fiestas
generalmente empiezan con la novena (nueve días), se acostumbra a llevar al
Santo por las calles del pueblo por la tarde cantando arrullos acompañados por
bombos y recogiendo limosna para cubrir los gastos de esta fiesta.
Se suele acompañar
estos arrullos por bombos, el cununu, la guasa, y maraca, raras veces la
marimba. Este arrullo consiste en versos cantados por una cantora; donde las
demás mujeres le contestan su principal característica, es la alegría, en
ocasiones realizan balsas, amarran dos o tres canoas, con una construcción de
caña guadua, allí embarcan al Santo acompañado con los músicos y cantores.
En la noche de la
víspera se reúne la gente a rezar y romper con el arrullo, hasta el amanecer,
la tarea de cantar es propia de las mujeres mientras los hombres acompañan
tocando los instrumentos o solo con su asistencia.
Los fiesteros o
padrinos para la fiesta de cierto Santo son las personas que en la madrugada
del velorio, cogen el Santo en una sabana y lo hacen bailar en la ronda,
demostrando así su compromiso con él, al amanecer el propio día del Santo se lo
acompaña con una procesión por las calles del pueblo, a veces con tiros de
escopeta, pero siempre cantando. En la época de una mejor economía estas fiestas
duraban hasta una semana entera, dedicándose después del velorio y del día del
Santo al baile de marimba.
Estas fiestas se
realizan depende en la respectiva capilla del Santo Patrón o en las casas de
los particulares que decidieron adquirir el compromiso.
En cambio en las
fiestas del año litúrgico como Navidad, Semana Santa, Fieles Difuntos, casi
siempre se celebran en la capilla.
En Navidad y
Semana Santa se trata de reproducir los eventos que originaron estas
festividades como por ejemplo se hace “el nacimiento”, se da algo curioso ya
que existe la tradición de robar al “niño”, saliendo luego toda la gente a
buscarlo por las calles de todo el pueblo para con mayor alegría arrullarlo y
devolverlo a la iglesia.
En Semana Santa
sin duda prevalece un sentimiento de tristeza y sufrimiento. Se tiene el
sentido de la Pasión de Cristo y cantan día y noche. En los propios días de la
fiesta se suele hacer la fiesta con la respectiva imagen acompañado de
oraciones antiguas y alabados.
Las Fiestas Cívicas
Las fiestas
Cívicas no tienen un rito con el cual se las celebra, y que existen lugares
donde no funcionan las escuelas, no existe el impulso del profesor para hacer
una velada o algo similar, simplemente se hace un día de vacación.
Cabe recalcar que
entre las fiestas cívicas de mayor importancia están las siguientes:
- 5 Agosto,
Independencia de Esmeraldas recordando en el contexto de la liberación de la
esclavitud.
- 12 Octubre,
Día de la raza que se celebra especialmente en homenaje a la raza negra.
Se celebran
también otras fechas dependiendo al respectivo día de la fundación del recinto
o de la parroquializacion.
Los Mitos
La población afro
esmeraldeña conoce una serie de mitos que se basan en su visión de las almas de
los muertos, creencia traída del África. Como:
- Se cuenta de
la presencia de almas que por la noche vienen a molestar o avisar algo; a
recoger sus pasos por donde han estado en vida, esta creencia se mantiene en
general en los velorios.
- Existen
personajes que viven en el monte, manglar, rio, mar. A estos personajes se los
conoce que por alguna razón están penando.
- La Tunda,
una mujer que no cumplió con sus obligaciones en el hogar y que se cree que se
lleva los niños al monte.
- El Riviel,
el alma de un ahogado que anda en un “potro mocho”, hasta encontrar una persona
para ahogarla también.
- El Duende,
de sombrero grande al que le gusta enamorar a las chicas jovencitas.
- La Gualgura,
que aparece en forma de gallina y otros mas para las cuales se tiene respeto y
hasta miedo.
Todos estos
personajes están viviendo y animando las distintas partes del medio ambiente
por lo cual se preocupan de realizar actos de protección necesaria, sobre todo
ofrecer oraciones y la señal de la cruz.
También se conocen
las brujas con sus secretos y hierbas, no solo saben hacer y curar maleficios
sino también preparar supuestos brebajes para problemas amorosos, siendo esto
su tarea principal y más buscada. Estas brujas se cree que se saben volver
pájaros y como tales matan chupando la sangre a niños, demostrado por alguna
señal de la cual se da cuenta la madre, se cree que estas brujas se reúnen en
arboles gigantescos junto con su maestro y dueño de su alma que es el diablo.
Como se ha
descrito estos personajes mitológicos están presentes en la vida de las
comunidades rurales, no solo a travez de los cuentos, sino también por las
experiencias propias que se tiene con ellos sobre todo de noche. Todos estos
mitos no son solo una representación del mundo del más allá, de la vida diaria,
sino también tienen una función de protección como para evitar realizar actos
malos sin dejar de ser mitos.